La caminata fue larga hasta llegar a la garita, como de costumbre los guardias estaban cumpliendo su labor con gran profesionalismo. Los pequeñines de kinder se acercaron y les preguntaron sus nombres, instrumentos de trabajo, su jornada, y tantas otras inquietudes.
Cada vez que ingresemos o nos retiremos del colegio estoy segura que saludáremos a los guardias con más aprecio pues ya conocemos lo importante y valioso que es su trabajo para el desenvolvimiento de toda esta comunidad educativa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario